Ojo Mágico


 Los Ojos

 

El ojo, órgano de la percepción sensorial, es natural y universalmente el símbolo de la percepción intelectual. Debemos considerar sucesivamente el ojo físico en su función de receptor de la luz física; y al ojo frontal o tercer ojo y al ojo del corazón en su función de recibir la luz espiritual. El ojo es femenino en tanto órgano sensible receptor de luz. En los sueños, en cambio, el ojo suele presentarse como un órgano de conocimiento; es, a la vez, el ojo del corazón y el espejo del alma. simboliza el sol interior. El ojo que mira al soñador de manera amenazante revela un sentimiento de culpa "Aquel que posee los ojos" es la manera en que los esquimales designan al chamán y clarividente. En el Bhagavad Gita (texto sagrado hindú) se identifica a los ojos con las dos iluminarias: el sol y la luna; estos son los ojos del dios. Tradicionalmente, el ojo derecho (sol) corresponde a la actividad y al futuro, mientras que el ojo izquierdo (luna) corresponde a la pasividad y al pasado. La resolución de ésta dualidad está simbolizada por el tercer ojo, el ojo frontal de Shiva (Dios hindú). Si los dos ojos físicos corresponden al sol y la luna y a la Irma, el tercer ojo corresponde al fuego. Su mirada reduce todo a cenizas, expresa el presente sin dimensiones, como una simultaneidad. Este es el ojo de la sabiduría de los budistas, que situado en el límite entre la unidad y la multiplicidad, entre el vacío y el no vacío permite percibirlos simultáneamente. El tercer ojo indica la condición sobrehumana en la cual la clarividencia adquiere la perfección. La visión dual también es una percepción mental: "El alma posee dos ojos escribió Silesio uno observa el tiempo, y el otro se orienta hacia la eternidad". También se dice que un ojo representa al amor y el otro a la función intelectual, pero la visión interior debe unificar tales dualidades. El ojo del corazón es el hombre viendo a Dios, pero también a Dios viendo al hombre. Es el instrumento de unificación de Dios y del alma, del Principio y de la manifestación. El ojo único, sin párpado, es el símbolo de la Esencia y el Conocimiento divinos. Cuando se encuentra dentro de un triángulo es a la vez un símbolo masónico y cristiano. El ojo único del cíclope indica, al contrario, una condición subhumana, de la misma forma que la multiplicidad de ojos de los monstruos místicos, cientos de ojos dispersos por todo el cuerpo y que jamás se cierran al mismo tiempo, simbolizan la absorción del ser por el mundo exterior y una vigilancia que sólo se dirige hacia lo externo. El ojo humano es un símbolo del conocimiento, de la percepción sobrenatural. La apertura de los ojos es un rito de apertura hacia el conocimiento, un rito iniciático. El ojo divino que todo lo ve también es simbolizado por el sol, es "el ojo del mundo", expresión que también se usa para designar a Bhuda.

 

" Te advierto, quien quiera que fueres, Oh! Tú que deseas sondear los arcanos de la Naturaleza, que si no hallas dentro de ti mismo aquello que buscas, tampoco podrás hallarlo fuera. Si tú ignoras las excelencias de tu propia casa, ¿cómo pretendes encontrar otras excelencias?  En ti se halla oculto el Tesoro de los tesoros. Oh! Hombre, conócete a ti mismo y conocerás al Universo y a los Dioses."

 

Inscripción en el Frontispicio del templo de Delfos en Grecia